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Fertilab, una segunda vida al biogás para la agricultura sostenible

Fertilab, una segunda vida al biogás para la agricultura sostenible

Obtener biofertilizantes con propiedades biopesticidas o bioestimulantes es el objeto de Fertilab, un proyecto que pretende dar una segunda vida al digestato resultante de la producción de biogás.

Cuando se produce biogás, un recurso cada vez más utilizado para tratar los residuos orgánicos y generar energía limpia, se produce un proceso de digestión anaerobia. El subproducto de este proceso es el lodo digerido o digestato, objeto del proyecto Ferilab, que quiere convertirlo en productos de valor añadido para la agricultura sostenible.

Estos productos son tres: fertilizantes minerales, biopesticidas y bioestimulantes. Los fertilizantes estarán enriquecidos con nutrientes de los lodos, los biopesticidas se obtendrán a partir de una fermentación en sólido en la que se inoculan cepas específicas y los bioestimulantes, que se obtienen utilizando cepas específicas que producen un gran número de bioproductos.

Con esto se espera mejorar el crecimiento de las plantas, obtener una mayor producción y mejorar la calidad del cultivo. De este modo, Fertilab no solo pretende sustituir productos químicos con un gran impacto ambiental como los fertilizantes, sino cambiar el escenario de la actual agricultura intensiva por estrategias más locales y sostenibles.

En una segunda fase el proyecto evaluará el uso, la aplicación y la posible comercialización de los bioproductos obtenidos y se creará un laboratorio de innovación digital para desarrollar herramientas y estrategias enfocadas a la fertilización sostenible a partir de la innovación abierta y colaborativa.

Se trata de crear un ‘living lab’, una plataforma de innovación abierta en la que participen distintos actores y donde se aborden nuevas propuestas agrícolas desde el punto de vista técnico, medioambiental y económico.

FertiLab tiene una duración de tres años (diciembre de 2022 – noviembre de 2025) y está financiado por los fondos Next Generation de la Unión Europea, dentro del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia del Gobierno de España (Ministerio de Ciencia e Innovación).

El consorcio está formado por tres universidades, dos centros de investigación y un socio industrial: la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB) con el grupo de compostaje (GICOM) liderando el proyecto, la Universitat Politècnica de Catalunya – BarcelonaTech (UPC), la Universidad Miguel Hernández (UMH) de Elche, el Instituto de Investigación y Tecnología Agroalimentarias (IRTA), el Basque Centre for Climate Change (BC3) – Klima Aldaketa Ikergai y la empresa FACSA (Fomento Agrícola Castellonense, S.A.). El presupuesto financiable del proyecto es de 643.662€.